La biomasa es un combustible a tener en cuenta por muchas razones. Una de ellas es su bajo impacto en el medio ambiente, además de ser una fuente de energía mucho más barata que otras como el gas o la electricidad. Un tipo de biomasa muy eficiente es el pellet, que prácticamente todo el mundo conoce, aunque no sepa muy bien cómo funciona. En este artículo nos centraremos en las características que tiene una chimenea de pellets.
En el post de hoy de HotFireDoor te contamos cómo son las estufas de pellets y sus principales ventajas respecto otras opciones. Si estás dudando en comprarte una, lee este post y te acabarás de convencer de esta buena opción para calentar tu hogar.
Las estufas de pellets son ecológicas
Esta es posiblemente una de las principales ventajas de estas estufas. El pellet es un material que se obtiene de los restos de poda y otros elementos como serrín de madera. No afectan al medio ambiente porque se utilizan los residuos de la industria de la madera, como grandes fabricantes de muebles, y los procedentes de la limpieza de bosques y montes. Se trituran y comprimen hasta conseguir algo parecido al pienso que se da a algunos animales. El resultado es un combustible limpio, que además tiene unas emisiones de CO2 muy bajas cuando se produce la combustión.
Las estufas de pellets son económicas
Aunque el precio de una estufa de pellet es algo más alto que el de una eléctrica o una de gas, por ejemplo, el combustible que utiliza tiene una alta eficiencia, además de que cuesta menos que otros. Con un saco de pellet de 15 kilos, lo normal en estos casos, se puede conseguir calefacción continuada entre 7 horas y 2 días. Teniendo en cuenta que a veces no hará falta tener la estufa encendida todo el día, el consumo será aún menor.
Las estufas de pellets son cómodas
Tanto o más que las eléctricas o las de gas. Estas estufas tienen un depósito que se carga con pellets y a medida que lo va necesitando, se van utilizando para generar la calefacción. Así que no es necesario estar pendiente de que el fuego pierda intensidad. Solo de mirar de vez en cuando que el depósito tiene suficiente material.
Además, se pueden programar para que se enciendan o se apaguen a una hora concreta, o cuando se llegue a una temperatura y vuelvan a arrancar si esta baja. Puedes levantarte y disfrutar de un hogar cálido y acogedor sin necesidad de estar intentando encender el fuego. La estufa se encarga de hacerlo por sí sola.
Fáciles de instalar
Las estufas de pellet no necesitan obra para instalarse. Solo hace falta un lugar donde poner la salida de humos y un enchufe cercano para el arranque. En muchas ocasiones son portátiles, de modo que se puede llevar la estufa de un lugar a otro sin complicaciones.
Seguras
Al no tener contacto directo con el calor, las estufas de pellets son bastante seguras, siempre que se tengas las precauciones necesarias. Tampoco hay peligro de que se produzca una fuga de gas, por ejemplo, ni de que se acumulen partículas o residuos peligrosos en el ambiente.
Como ves, las estufas de pellets, al igual que las chimeneas de pellets, son una opción bastante interesante si buscas renovar la calefacción.